La publicidad exterior es una forma única y memorable de conectar con las personas, debido a que se crea un vínculo real de interacción entre marcas y consumidores por medio de distintas estrategias visuales.

A la hora de planear diseños para publicidad exterior se debe de tener mucha responsabilidad, ya que para realizarlo es necesario tener visión, habilidad y sensibilidad para conseguir un impacto eficaz en el público al que se dirige. Un diseño mal realizado puede perjudicar la rentabilidad de la campaña y la reputación de la marca.